UN RETO ESTRUCTURAL SOBRE LOS TEJADOS DE HAMBURGO

Más allá del puerto y de la sala de conciertos Elbphilharmonie, Hamburgo (Alemania) tiene otros muchos puntos de interés para visitantes y curiosos. Visitar, o no, la Sierichstraße, en el barrio de Winterhude, es probablemente una cuestión de gustos, pero es una de las pocas calles de Europa que cambia de sentido a lo largo del día para adaptarse a los flujos de movimiento de las personas. Mientras que por las mañanas los coches pueden utilizar sus dos carriles para entrar en el centro de la ciudad, por la tarde sólo se permite la circulación en sentido contrario. La calle está flanqueada por villas históricas y grandes edificios de apartamentos, y uno de estos majestuosos bloques tuvo que elevarse una planta y media para crear modernos áticos, lo que, dado el clima de Hamburgo, sólo era factible si se montaba una cubierta de protección contra la intemperie para proteger la obra. La empresa Busch Gerüstbau GmbH & Co. KG, con sede en Hamburgo, se encargó de la planificación y ejecución del montaje del esencial andamio de fachada, así como de la cubierta Keder XL de 2.000 m².

«Necesitábamos un andamio de fachada y una cubierta Keder si íbamos a añadir un piso más en un edificio ya existente. Lo que al principio, en una llamada telefónica, parecía un encargo cotidiano y sencillo, se fue complicando cada día más a la hora de planificarlo y llevarlo a cabo», explica Christopher Busch, director gerente de Busch Gerüstbau GmbH & Co. KG, especialistas en montajes de andamios. La Sierichstraße, una de las calles más transitadas de Hamburgo, tuvo que estrecharse a un solo carril en la zona de la fachada para hacer sitio a la grúa y al equipo de trabajo. Para no ocupar más espacio público del estrictamente necesario, la acera se convirtió en un paso peatonal cubierto utilizando elementos del sistema de andamios multidireccional Allround y el sistema de cerramiento Protect, ambos de Layher. Sobre él y sobre todo el jardín delantero se montó una plataforma de 70 m. de largo y hasta 6 m. de ancho. «Cualquiera que haya pasado por aquí en hora punta sabrá que cada centímetro de vía es vital. Por eso, cubrir el jardín por completo fue la mejor opción. Así pudimos almacenar temporalmente todos los materiales de construcción necesarios, sin ningún problema, durante los 18 meses de obras y reducir al mínimo las molestias al tráfico», añadió Stefan Grasnick, supervisor de obra y responsable del proyecto.

Un verdadero reto estructural

En total, los especialistas en montaje de andamios de Hamburgo montaron aproximadamente 7.400 m² de andamios Layher. Antes de poder añadir una planta más al edificio primero hubo que desmontar el tejado existente, lo que tuvo enormes consecuencias para el diseño del andamio de fachada Blitz de Layher, ya que hizo imposible anclarlo a la fachada en las tres plantas superiores. «Dimos varias vueltas a este dilema estructural, ya que toda la cubierta Keder XL también se tenía que apoyar en el andamio Blitz, por lo que hubo que añadir un refuerzo adicional en los niveles superiores». Stefan Grasnik es un montador de andamios experimentado, pero «a pesar de todo, resultó ser toda una batalla de materiales. Montamos otros 1.330 m. lineales de vigas de celosía, sólo en el andamio Blitz, para que todo también fuera estructuralmente seguro». En la parte del tejado, se fijaron tres estructuras de andamio, cada una de las cuales pesaba más de 2,3 tn para que la estructura general del andamiaje estuviera aún mejor equipada para afrontar los duros retos que le esperaban.

René Stender, responsable de ventas de Layher en Hamburgo, estuvo visiblemente impresionado: «Los consultores de la ingeniería estructural hicieron aquí un trabajo realmente fantástico. Esas estructuras de soporte contribuyeron a que tanto todo el andamio, como los más de 2.000 m² de cubierta Keder XL, estuviesen en condiciones de soportar los interminables caprichos de la meteorología».

El éxito siempre viene del trabajo en equipo

«Un proyecto como éste depende del trabajo en equipo, y no me refiero sólo a las personas del equipo de montaje o de la oficina técnica. La cooperación con el cliente, con otros gremios, los consultores de la ingeniería estructural y, por último, pero no por ello menos importante, Layher, es igualmente fundamental para el éxito de nuestros trabajos», comentó Christopher Busch. La estrecha colaboración con los especialistas en estructuras y el contacto cercano de Layher, desempeñó un papel especialmente importante en este proyecto, ya que los requisitos iban cambiando con frecuencia, lo que significaba que se necesitaban nuevos cálculos y mucho nuevo aporte de material para la obra, en un plazo de tiempo muy breve. Busch no pudo estar más satisfecho: «Esto demuestra claramente las ventajas de una buena red en la que todos colaboran para realizar un proyecto con profesionalidad. Layher formó directamente a un empleado en el uso del software LayPLAN CAD, y esto redundará que en el futuro podremos planificar y llevar a cabo nuestros proyectos de forma aún más eficiente. Poder ver todos los detalles del diseño de un andamio en la pantalla de un ordenador o dispositivo móvil abre inmensas posibilidades. No sólo se pueden planificar con gran precisión los materiales necesarios, la logística y los pasos de montaje, sino que también se pueden identificar los retos arquitectónicos o estructurales en una fase temprana y elaborar soluciones antes de ejecutar la obra. El montaje de andamios es cada vez más digital y nosotros estamos a la vanguardia, aprovechando constantemente sus ventajas», concluyen ambos profesionales, no sin orgullo.

El milagro económico de Hamburgo

Las modernas instalaciones de Busch Gerüstbau GmbH & Co. KG, no lejos del aeropuerto de Hamburgo, acogen normalmente a 30 empleados fijos. La compañía fue fundada por Gerhard Busch en 1963 como una empresa especializada en pintura y decoración durante el «período del milagro económico alemán», y en 1988 el segmento del andamiaje se escindió. Busch ha confiado en las soluciones de andamiaje de Layher desde sus inicios, y hasta el día de hoy trabaja exclusivamente con los sistemas fabricados por Layher. Christopher Busch, licenciado en ingeniería e hijo del fundador, se unió al equipo directivo en 2003 y ha estado al timón de la empresa, en constante crecimiento, desde entonces. Como «nacidos y criados en Hamburgo», están especialmente orgullosos de su trabajo en conocidas instituciones de la ciudad, como la comisaría de policía de Davidwache, los Arcades de Alster, el aeropuerto y la Ópera Estatal de Hamburgo. «Entre nuestros clientes gozamos de una gran reputación por nuestra calidad y experiencia, algo que tenemos en común con Layher, de quien diría que defiende valores similares», concluye Busch.

SISTEMAS UTILIZADOS